El final del BAFF
Después de la decepción que supuso Survive Style 5+ y la indiferencia que Passages nos dejó, nada mejor que recuperarse con una buen thriller made in Hong Kong: One night in Mongkok. Los jefes de dos bandas enfrentados por el asesinato del hijo de uno de ellos. Polis flipantes, malos flipantes, asesinos a sueldo flipantes, y el acojonante! del JEFE en el climax final, hicieron de la sesión algo memorable. Después, para sobreponernos de la falta de aire, Tropical Malady y sus dos historias, fagocitándose la una a la otra, nos devolvió a la ilusión de la mejor poesía visual sólo para mentes exquisitas. Ayer, Johnnie To y su romántica Yesterday Once more puso la guinda del pastel que hoy, en apenas una hora, nos vamos a comer: Jiang Hu, mejor conocida como la cuarta parte de la insuperable saga Infernal Affairs. Sin embargo, esto ya se acaba... Finalmente, me perdí The Taste of Tea y The Green Hat, la ganadora del premio del público y la que se llevó el Durián de Oro, respectivamente. Con seguridad, las que más me hubieran gustado. La primera por enorme ejercicio de surrealismo y fantasía naïve, y la otra por desoladora crónica del desamor en tiempos posmodernos. Pero estas cosas pasan. Como también han pasado estos diez días en la orilla de Las Ramblas, las cenas en el Fortuny, los taxis, el trabajo, la redacción, los autobuses, los ruegos por chapas-muchas- y por camisetas, ... En fin, esos otros detalles que hacen de un festival un evento mucho más allá de lo entrañable. El BAFF que viene estaremos allí de nuevo.
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síl -